Hoy nuestro agradecimiento es para las FMA y los
profesores del colegio.
Un 5 de agosto de 1872 una joven, Maín, daba inicio a su
sueño: la fundación de las Hijas de María Auxiliadora. María Dominga Mazzarello, más conocida como Madre
Mazzarello, respondiendo a la llamada de Dios hacía realidad lo que
albergaba en su corazón.
Queremos dar las GRACIAS al Espíritu
Santo, verdadero inspirador de esta obra que se
inició hace la friolera de 150 años y que hoy sigue haciendo camino con
nosotros en la persona de todas y cada una de las Sores.
GRACIAS A TODAS ELLAS, que
son las continuadoras de esta gran obra. GRACIAS, porque
respondiendo a la llamada se entregan para seguir a Jesucristo.
Cada una de las hermanas, con plena
libertad, se entregan totalmente a Jesús y hacen
voto de Castidad, Pobreza y Obediencia para
siempre. Adquieren en presencia de todo el pueblo de Dios un compromiso que
asumen en su profesión religiosa.
En un mundo en el que el compromiso parece
no ser un valor importante en nuestra sociedad, ellas siguen siendo un modelo
para los jóvenes. Por todo ello, sale de nuestra boca este enorme GRACIAS.
Y junto a ellas a todas las profesoras y profesores que están ahí con ellas,
codo con codo, acompañando y alentando el carisma salesiano. GRACIAS.
Todos y cada uno de
nosotros, también, hermanas y profesores/as, hemos sido niños y tenemos en
nuestra mente un bello recuerdo de un profesor/a que marcó nuestra vida.
Gracias a los que pasaron por este colegio y que por diferentes motivos siempre
tendrán un lugar en nuestro corazón de niño, de niña. ¡¡GRACIAS!!
También queremos recordar hoy a todas las hermanas que ya
pasaron a gozar de la presencia del Padre. Ellas han cumplido fielmente ese
compromiso hasta el final.
Rezamos
un Ave Mª por cada hermana, por cada profesor y profesora, maestro que llevamos
en el corazón. Gracias.
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