¡Buenos días!
"Me pondré en camino,
volveré a casa de mi padre y le diré…”
¿Habéis buscado alguna vez
en el diccionario el significado de «pródigo»?. Es la «persona que desperdicia
o consume su hacienda en gastos inútiles e incontrolados». El hijo pródigo. Pródigo, sí pero ante todo hijo.
«Pródigo» no es más que un adjetivo, feo, fuerte o todo lo que le queramos
añadir; hace referencia a las acciones, a ese desperdiciar o consumir. Somos
hijos desde que nacemos hasta que morimos; o incluso desde antes de nacer,
desde el momento en que nos conciben hasta la eternidad. Fíjate, nuestra
condición de hijos es mucho más duradera que nuestra vida.
Y donde hay hijas, hay madres y padres,
biológicos o no, hay alguien que cuida, perdona y ama; hay alguien que educa y
ama; alguien que permite y ama; alguien que espera y ama.
La conocida parábola del “Hijo pródigo” (Lc 15:11-32) habla sobre la disposición de un padre para perdonar a sus hijos que han pecado contra él, y nos permite reflexionar sobre la misericordia. ¿Sabes el significado de esta parábola? (Si alguien lo necesita, se adjunta un vídeo )
¿Conocéis el significado
de la palabra misericordia?
¿Soléis ser
misericordiosos con vuestra familia, amigos, compañeros, profesores?
Agradezcamos a Dios por su
infinita misericordia y alegrémonos en esta Cuaresma porque Dios siempre
perdona.
¡Buen día!
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