Hace pocos días se conocía la noticia de un perro abandonado en medio del océano. Afortunadamente, un grupo de
amigos que estaba navegando y, entre todos, pudieron salvarlo.
Este es un ejemplo claro de lo que estamos hablando esta semana. La gente que me rodea, los que hacen que
todo sea mejor pueden, incluso, ayudarme a preocuparme por los que tienen menos suerte.
En este caso se trata de un perro, pero podemos hacer un paralelismo con esta historia y pensar:
¿puedo yo, con mis seres cercanos, hacer la vida mejor a alguien que viva un momento menos afortunado?
Piénsalo. Y piensa, también, en quien te ayudaría a mejorar, aunque sea solo un poquito, la vida de alguien
que no esté muy lejos de ti.
Rescate en alta mar, grupo de amigos salva a perrito que nadaba en medio del océano
Buenos días
Buenos días realizado por los alumnos de PDC I
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