Lunes 8 de junio: luz que ilumina

Buenos días,

Cuando llegamos al final de una etapa, en este caso un curso, la tendencia, siempre, es hacer balance. Si retomamos los primeros buenos días nos encontramos con el título: “Una luz que enciende otras”. Por entonces, comenzábamos conociendo el lema que nos iba a acompañar de la mano de testimonios de muchas personas que han sido, son y siempre serán, luz para los demás. Ahora, conscientes de que nos quedan apenas diez días para concluir oficialmente este curso escolar volvemos a ser nosotros los protagonistas. Esta vez seremos nosotros los que nos vamos a convertir en testimonio vivo para los que nos rodean. Las vacaciones llegan pero nuestra luz no se apaga, al revés, es el momento idóneo de recargas pilas, descansar y ¡brillar más que nunca!

Dar testimonio implica haber vivido una experiencia, es decir, haber sido testigo de ella. Nosotros hemos tenido la suerte de contar con muchos momentos inolvidables a lo largo de todos estos meses: el Bicentenario de don Bosco, Gratitud, María Auxiliadora… entre otras.  No será por falta de oportunidades pues hemos podido  vivir acorde a nuestro lema puesto que hemos encendido la antorcha, pasado a ésta de uno a otros lugares y ahora nos toca seguir expandiendo su luz. A lo largo de esta semana, os iremos dando más pautas para ayudaros a una misión importante, dar testimonio de la luz que nos habita. Si todo esto acabase aquí, nada tendría sentido.

Ahora, pensad en silencio en el mensaje de esta imagen. ¿Os transmite algo?

Y, os proponemos ir dándole vueltas a estas preguntas: ¿Y tú? ¿Cómo y cuándo puedes ser testimonio de todo lo que durante este año has vivido, compartido y aprendido?

Concluimos todos juntos rezando en voz alta esta oración para que Jesús nos ilumine a la hora de encontrar el modo en forma de acciones y palabras para ser sus testigos.

Oración

Jesús dame tu luz, para que encuentre sentido a mi vida.
Jesús dame tu luz, para que sepa vivir con alegría
Jesús dame tu luz, para que sepa compartir mi vida.
Jesús dame tu luz, para que deje de lado mis tristezas.
Jesús dame tu luz, para que deje atrás todas mis dudas.
Jesús dame tu luz, para crecer y  madurar.
Jesús dame tu luz, para saber lo que quieres de mi.
Jesús dame tu luz, para librarme de tanto consumismo.
Jesús dame tu luz, para ayudar a cuantos lo necesitan.
Jesús dame tu luz, para no tener miedo a lo que pidas.
Jesús dame tu luz, para romper mis comodidades.

María, auxiliadora de los cristianos…

Buenos días elaborados por M. Isabel Mota