¡Buenos
días chicos/-as de la ESO y Bachillerato!
Dejamos
atrás la breve semana pasada que fue para los alumnos de la ESO de
readaptación al ritmo del día a día del curso y para los mayores
de Bachillerato de “prolongación de vacaciones” por su viaje cultural por
tierras de Castilla. Hoy comenzamos una semana entera y, en orden, la
segunda semana de PASCUA. En ella, los Buenos Días estarán unidos a
la palabra VIDA
(renacer, primavera…) y lo que esto supone en relación al tiempo
litúrgico que vivimos.
Me
gustaría compartir con vosotros las siguientes preguntas y que,
espontáneamente, algunos dierais respuesta. Por ejemplo:
¿Qué
os sugiere o con qué relacionáis la palabra VIDA?
¿Qué
importancia/valor tiene esta palabra?
¿Cuáles
son los pilares/fuentes de VIDA?
Seguro
que muchos, o todos, habéis contestado o pensado de manera acertada
cada una de ellas. Pues bien, esta semana nos centraremos en la
última pregunta y hablaremos… SÍ de tres pilares fundamentales de
VIDA: la
TIERRA, el AGUA
y el SOL.
Seguro
que a lo largo de vuestros años de escolarización habéis aprendido
muchas cosas sobra cada uno de ellos como ser un planeta, ser
incolora, insípida…, ser centro del universo…, pero también
estos pilares son nombrados en muchas citas bíblicas y están
estrechamente asociados con la VIDA
de JESÚS RESUCITADO.
Os adjunto una foto para que vayáis poniéndole cara...
Antes
de terminar os invito a que, durante esta semana, escribáis en la
mitad de un folio una o dos razones y consecuencias relacionadas con
la TIERRA, el AGUA y el SOL respectivamente y las compartáis en una
tutoría.
Y,
ahora sí, acabamos con esta oración y que practiquemos
esa otra mirada con estas tres fuentes de
VIDA.
SALMO
148
[¡Aleluya!]
Alabad
al Señor en el cielo,
alabad
al Señor en lo alto.
Alabadlo,
todos sus ángeles;
alabadlo,
todos sus ejércitos.
Alabadlo,
sol y luna;
alabadlo,
estrellas lucientes.
Alabadlo,
espacios celestes
y
aguas que cuelgan en el cielo.
Alaben
el nombre del Señor,
porque
él lo mandó, y existieron.
Les
dio consistencia perpetua
y
una ley que no pasará.
Alabad
al Señor en la tierra,
cetáceos
y abismos del mar,
rayos,
granizo, nieve y bruma,
viento
huracanado que cumple sus órdenes,
montes
y todas las sierras,
árboles
frutales y cedros,
fieras
y animales domésticos,
reptiles
y pájaros que vuelan.
Reyes
y pueblos del orbe,
príncipes
y jefes del mundo,
los
jóvenes y también las doncellas,
los
viejos junto con los niños,
alaben
el nombre del Señor,
el
único nombre sublime.
Su
majestad sobre el cielo y la tierra;
él
acrece el vigor de su pueblo.
Alabanza
de todos sus fieles,
de
Israel, su pueblo escogido.
Buenos Días elaborados por Luis Miguel Recio
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