Contigo me levanto si me tropiezo
Comenzamos la segunda semana de cuaresma con
el lema “contigo me levanto, si me tropiezo”
Debemos darle
el significado de error a este tropiezo. Todos tropezamos, todos nos
equivocamos, cometemos errores. Ante esta situación, tenemos dos formas
posibles de actuar. La primera es castigarnos por nuestro error, pensar
constantemente en él, avergonzarnos y repetirlo a cada momento.
La otra
posibilidad tiene que ver con el perdón. Tratarnos a nosotros mismos como lo
haría el Padre y entender que del análisis de estos tropiezos podemos obtener
un aprendizaje que servirá de base para nuestra vida futura.
Teniendo en
cuenta que, además, si somos capaces de aprender a perdonarnos, también
habremos aprendido a perdonar a los demás.
Cuando el peso
es grande, cuando no podemos solo con esa carga, podemos acudir a la confesión
y buscar, más allá de nuestro perdón, el perdón de Dios.
REFLEXIÓN: ¿Hay
algo que no te hayas perdonado? Es un buen momento para poner fin a esa trampa
que te haces a ti mismo.
Para que Dios
nos ayude en esta difícil tarea, rezamos un Padre nuestro.
María
Auxiliadora de los cristianos.
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