¡Buenos días!
Comienza una semana corta y atípica en la que celebramos dos acontecimientos importantes: el aniversario de la Constitución española y la fiesta de la Inmaculada Concepción de María.
Además, seguimos en este tiempo de Adviento; un tiempo de preparación, de espera, de búsqueda de LUZ. La luz es una de las cosas más típicas de la Navidad: luces que decoran nuestras ciudades, nuestras casas, la costumbre de encender una corona de Adviento en la que cada semana se enciende una velita... pero no es sencillo eso de dar luz porque, para poder dar luz, HAY QUE GASTARSE.
Todos nosotros somos velas en potencia pero no todos actuamos de la misma manera:
- Hay quien decide caminar solo, alejándose tanto de los otros (y de Dios) que termina por enfriarse; ¿eres de esos?
- Otros viven dejando que sean otros los que iluminen; sin implicarse del todo en las cosas; ¿cuándo actúas tú de ese modo?
- Sin embargo, los hay que son más decididos. Se lanzan en la tarea de iluminar, alimentan su vida y son capaces de arriesgar. Entienden, de una vez, que solo cuando somos capaces de gastarnos, de dejar parte de nuestra vida (a través de la entrega, la caridad, la solidaridad, el compromiso...); nos podemos convertir en Luz para los demás.
Os contaré una historia: Un día, 34 "iluminados" aceptaron un reto para nada fácil: hacer, en un tiempo récord, un montón de adornos navideños con material reciclado para decorar todas las escaleras del colegio. ¿Objetivo? Hacer algo por los demás este Adviento. ¿Motivación inicial? Nula. ¿Recompensa? No importaba... y el resultado lo lleváis disfrutando un par de días.
Fueron vuestros compañeros de FP Básica, los que vienen a clase por las tardes y por eso muchos no les ponéis cara, los que decidieron arriesgar, aceptar el reto y gastarse un poquito por los demás en esta época del año. Ninguno se acuerda ya de la pereza que daba ponerse a recortar ni a pintar, de tener que acordarse todos los días de traer material de casa ni de las prisas por sacar este proyecto adelante. Las felicitaciones, el reconocimiento por el trabajo realizado y la satisfacción que da subir las escaleras, anulan todo lo anterior. Esta era la recompensa: darse cuenta de que dándonos a los demás, nos hacemos más grandes.
Luego, como nos gusta tanto reirnos y pasárnoslo bien en FP Básica, alguien dijo: "¿y si hacemos un Mannequin Challenge para rematar la tarea? Y como no... aceptamos el reto.
Pincha aquí: http://anonimatosnsp.blogspot.
Al mundo le falta luz. No vivas a medias. En este Adviento, date y entrégate a los demás con generosidad, entrega tus cuentas. Acepta el reto de ser LUZ.
¡Y RECUERDA!
A las 14:40 te invitamos a compartir 10 minutos de oración para prepararte para "¡La Que Se Avecina!"
Buenos días elaborados por Iria Barreiro (Tutora FP Básica)
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