Durante esta semana vamos a hablar de la Violencia de Género. De esa violencia que se ejerce sobre las mujeres por su género, sólo por eso. Seguro que alguno estáis pensando que también se ejerce violencia sobre los hombres...no voy a entrar en debate. La definición de Violencia de Género se refiere sólo a las mujeres y esto no lo he decidido yo, es algo que está establecido en la ley. Y si es así, por algo será...
Y aquí, en el colegio, también queremos haceros conscientes de este tema. Algunos cursos de la ESO y Bachillerato ya hemos empezado a sensibilizar con charlas, tutorías, y algún Buenos Días anterior. Así que esta semana vamos a seguir. Realmente estos Buenos Días deberían ser para la próxima semana ya que el día 8 de marzo es el Día Internacional de la Mujer, pero esa semana en nuestro colegio vamos a motivar la campaña de DOMISAL de este año en la que intervienen más miembros de la comunidad educativa, así que nos hemos adelantado un poco.
Quería empezar la semana hablando de algunas de esas conductas machistas que tenemos normalizadas y a las que se llama "micromachismos", las tenemos tan asumidas que ni nos damos cuenta. Y nos parecen normales, porque forman parte de nuestra cultura, de la sociedad en la que vivimos y... eso es así. Mis preguntas son miles cuando me paro y pienso en muchas de ellas. Pero lo que más me gusta es cuando veo que algunas de mis alumnas y alumnos las detectan y las frenan en seco. Tienen claro a sus 15 años lo que yo he tenido claro a los... jejeje... a mi edad. Así que pienso "hombre, algo hemos avanzado" Y digo "algo" porque no todos mis alumnos y alumnas lo tienen claro, a algunos los sorprende, a otros les crea inquietud y... se preguntan: "¿Y ahora cómo debo actuar?" Si al menos, se dan cuenta de que algo no va bien, de que eso que consideraban normal... ahora ya no les parece tan bien... vamos mejorando. Pero mejoramos taaan poco. Os dejo parte de un artículo que se publicó en El País la semana pasada donde dice el periodista que las mujeres nos enfrentamos a una estructura gigantesca que ha hecho que incluso nosotras formemos parte de lo que tenemos que combatir. Leedlo y comentad qué os parece.
"(...)Lo explica José Ignacio Conde, doctor en Economía en la Universidad Carlos III de Madrid, con tres trabajos científicos de resultados demoledores. El primero lo publicó Science el año pasado: a partir de los seis años las niñas dejan de considerarse tan listas como los niños. El trabajo se hizo con 400 niños de entre cinco y siete años. En una de las pruebas se le contaba a los niños la historia de una persona muy inteligente sin decirles a qué género pertenecía. A los cinco años, los niños decían que el protagonista era un niño y las niñas, una niña. A los seis y siete, muchas niñas ya decían que el protagonista era un niño. El otro estudio lo publicó Harvard en 2002; a unos alumnos de un MBA se les entregaron copias de un trabajo de Heidi Roizen, una inversionista de capital riesgo, y a otros alumnos copias del mismo trabajo pero cambiando el nombre de Heidi por Howard. El grupo que leyó el trabajo firmado por Howard concluyó que era un tipo muy competente con el que apetecía trabajar, además de parecer un buen hombre; el grupo que leyó el trabajo firmado por Heidi la consideró "muy política", creyó que buscaba "su propio beneficio", que era "mandona" y no era apetecible trabajar con ella. (...)
Irene Rial, profesora del colegio Cruceiro de Vilalonga (Pontevedra), afirma que el estereotipo comienza pronto, desde la ocupación del espacio del recreo, predominantemente masculina, hasta comentarios sobre la ropa o el físico. Rial da clases a niños de 9 años. "En general ellas sienten más necesidad de aceptación, como si estuviesen más examinadas". Este colegio lleva a cabo un intenso trabajo sobre igualdad. "Lo que notas es que tanto ellos como ellas responden a la perfección a preguntas relacionadas con feminismo, por ejemplo. Pero de memoria, como algo aprendido de una asignatura. Un niño te dice: 'Los niños y las niñas somos iguales y tenemos los mismos derechos', por ejemplo. Y le preguntas a ese niño qué hace él en casa y cómo ayuda a su familia, y responde con naturalidad: 'Ayudo a mi madre a recoger mi ropa'(...)"
Curioso ¿no? Pues ahí lo tenemos, cada día. Sólo nosotros podemos cambiarlo, porque podemos, porque no podemos decir "la sociedad es así" y quedarnos tan a gusto. La sociedad evoluciona y puede ser mejor, muuuucho mejor. Y acabar con la violencia de género pasa por acabar con la desigualdad. La desigualdad genera entre otras cosas abuso de poder, inseguridad, genera... violencia.
¡Pasad un buen día!
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