¡Buenos días! Ya estamos en la última semana del curso. Todavía quedan algunos exámenes, algún pequeño esfuerzo, y también nos queda compartir la alegría de lo que hemos vivido juntos durante este curso. Es momento de recoger el fruto de nuestro esfuerzo, y también es tiempo de que todo lo que hemos hablado y vivido durante el curso no se quede en unas bonitas palabras, sino en un compromiso real para ser luz, para encender nuestra antorcha.
Es tu hora, es el momento de comprometerte, de llevar tu luz, de alumbrar, de cambiar las situaciones negativas y de transformar las dificultades...
Es tu hora, es el momento de ser sal y ser luz, de mirar adelante, de comprometerte con una vida y un mundo mejores...
MARÍA, AUXILIADORA DE LOS CRISTIANOS...
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