Hace pocos días veíamos como Jesús llegaba a Jerusalen triunfante y era recibido como un auténtico rey. Ayer veíamos como Jessús no explicaba que todo lo que hizo fue por nosotros y que nos invitaba a que nosotros también hiciéramos lo mismo con nuestros cercanos.
Hoy, Viernes Santo, con este víacrucis que se desarrolla a patir de la película de "La Pasíon", podemos ver cómo Jesús fue sin duda un hombre diferente, haciendo, soportando y demostrando que hay que creer en el amor de Dios hasta el extremo, como nos lo muestra su hijo.
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