Iniciamos la tercera semana de Cuaresma, muy descansados
después del puente de San José. Esta semana trataremos uno de los temas más
importantes en la vida del creyente, el tema de la Oración.
Desde que éramos pequeños hemos aprendido a orar a dios, pero cuando nos
hacemos mayores nos vemos obligados a profundizar en esta experiencia, para
hacerla el centro de nuestra vida. Por medio de la oración hablamos con el Señor,
y lo hacemos por diversas razones:
por gratitud, por la salud, para aprobar los exámenes, para conocer cuál es la voluntad de Dios en
nuestra vida, para sentirnos en paz...
Si rezamos habitualmente, esta experiencia terminará siendo
para nosotros otra forma de respiración, que nos permitirá estar siempre en presencia
de Dios y en comunión con el Espíritu de
Jesús. ¿Te animas? ¿Quieres conocer personalmente a Jesús? Pues ora, solo, o
con la Escritura, Él te escuchará y sentirás su presencia y amor en tu vida. No
olvides que Él sabe todo de ti antes de que tú se lo digas.
Veamos un vídeo.
Terminamos rezando el Padre Nuestro...
¡Te esperamos!
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